Chris

La sensación anestesiante era la que me provocaba volver a hacerlo, dejar de sentir gran parte de mis extremidades, y de mi rostro, era lo mejor que podía existir...tan sólo sentir lo que pensaba, no se si se entiende, solo sentir mi interioridad, lo que realmente era en toda su magnitud y magnificencia y mil hueás que empiezan con "Mag"...como mágico..que se yo.
-Cristina hueón, vuelve!-... que chucha?, dije para mis adentros...era la voz de alguien conocido.
-Crista, oye! me escuchai?...aló?, alooooo?, esta tipa no está en la faz de la tierra Diego, te dije que no le dieras de esa tontera-... Empezé a volver.
- AAAAH, no griten!, dije luego de hacer un esfuerzo que me pareció muy grande, como para solo realizar el acto de hablar... entonces entendí que había consumido más coca de la normal... por qué?
- Cristina, última vez, me estás escuchando?, porqué carajo jalaste tanto, sabes que te puede dar un ataque o que se yo, y ahí quedaste, tiesa, que hago yo después sin ti?
- te puedes callar?, estoy bien.- dije.

Me levanté de el sillón, y me dio un ataque de risa al escuchar una cumbia última en la radio, me enfermaba la cumbia, pero sin embargo igual puse de todo mi arte para bailarla a todo ritmo, mientras le subía el volumen... todo me dio vueltas, asique me fui a hechar en las reposeras de afuera, al lado de la piscina que había en la casa... no tenía idea de quien era la casa, ni como llegué ahí, creo que me trajeron, luego de un carrete...que se yo, estaba todo oscuro, y estaba sola, en todo caso poco me importaba. Una vez sentada me puse a reir denuevo, esta vez sin razón... y luego sentí una presión en el pecho, algo raro... y se me nubló la vista... no sabía que me pasaba, pero me dolía mucho, demaciado... pensé en un ataque cardiaco..algo...una subida de presión...pero no era nada de eso, algo húmedo calló por mis mejillas, y comprendí que estaba llorando, así, sola, llorando triste y amargamente al lado de la piscina, tras unos arbustos, de manera que nadie me viera... entendí que lo extrañaba demaciado, que me dolía su ausencia, que no entendía porque las cosas habían ocurrido así... más bien, porque no habían resultado como se supone que deberían haber resultado, lo amaba, y el no a mí... creo que lo quize demaciado, y no recibí lo mismo...bienvenidos a mi mundo...

Entré a la casa otra vez, esta vez nadie me miró, estaba sola, en un lugar en el que nadie me parecía familiar, el ambiente estaba viciado, a alcohol, a droga...

entonces alguien me toca el hombro desde atrás.
-Hey rubia, quieres venir con nosotros?
No conocía al tipo... jamás lo había visto, sin embargo me parecía que lo conocía de hace mucho...era raro. Lo pensé
- Obvio.- respondí

Me subí al auto, con 4 personas más que no conocía... algo raro sentí... que estoy haciendo?
- PARA!- grité
- Que onda rusia?, que no nos ibas a acompañar?, dale, no seas fome.
- para hueón!, yo me quiero bajar de aquí.- dije.

El auto paró, y me bajé en un peladero, ahora si que estaba perdida, pero en realidad no me importó mucho...


Me dolía denuevo, entonces me recosté en el suelo a llorar denuevo, con un agujero en mi corazón, y una herida en mi alma.